Suena lógico, pero a veces nos olvidamos que estamos creando contenido dirigido a personas que tienen muchas opciones, y que, conforme le ofrezcamos una buena experiencia de lectura, podremos desarrollar confianza y lealtad. Cuando un lector recibe lo que está buscando de una forma fácil y directa, se comienza a desarrollar familiaridad, respeto y recurrencia.
Sobre todo por la falta de tiempo, tendemos a publicar contenido sin tener en cuenta la importancia de la subtitulación y de ofrecer formatos que sean agradables a la vista y fáciles de rastrear para entender de qué se trata y decidir si se quiere o no seguir leyendo.
Aún muchas publicaciones estilan publicar en formato largo, ya sea porque se está colocando en el sitio web el contenido del impreso, o porque aún creen, erróneamente, que mientras más largo un texto mejor ranking conseguirán en los buscadores.
En esta edición de Hablemos Editorial, te presentamos algunas ideas para mejorar el formato de tus escritos y conseguir una mejor interacción con los usuarios. Es lo que la industria está llamando escritura UX o UX Writing.
Si consideramos que el 45% de las personas leen menos de 111 palabras de un sitio web, y que la capacidad de atención de una persona hoy día es de 8 segundos, nos damos cuenta de que es vital captar la atención de los usuarios con formas novedosas y cautivadoras.
Aún así, una vez captamos la atención de los lectores, lo más que leen son unas 490 a 550 palabras, así que es esencial poder ofrecer información de manera concisa.
La escritura UX (Del inglés ¨User Experience¨ o experiencia de usuario), además de ayudar a que un texto se lea más fácilmente, colocándole títulos, subtítulos, creando viñetas, separaciones o imágenes de ayuda, establece un tono de conversación y cohesión en el mensaje.
Cada publicación debe tener una voz, un estilo y unos valores que deben estar presente de manera consistente el estilo de comunicación que emplea en todo lo que publica.
La llamada Experiencia de Usuario (UX) es un proceso estratégico de diseño que se popularizó con el advenimiento del medio digital. Lo que busca es producir un producto que atienda la necesidad de sus usuarios, que se pueda utilizar de manera intuitiva y que evoque emoción y aprecio, lo que ocasiona la recurrencia de uso.
Claro está, si bien el diseño gráfico es primordial, este se sostiene con palabras y contenido que facilitan presentar un mensaje.
Esta es la forma en la que Google incorpora UX Writing como parte de su equipo de UX.
Una práctica que ocurre con bastante frecuencia, es que la persona que redacta el contenido se integra al grupo de trabajo cuando el producto ya está casi finalizado. O peor aún, entrega el contenido sin tener claridad en cómo luce el espacio donde será colocado. Esto se traduce en textos muy largos, ilegibles, sin un formato amigable y en la pérdida de oportunidades para crear elementos gráficos que pueden aportar mayor claridad y estética.
Lo recomendado es que los redactores trabajen hombro con hombro junto a los diseñadores y conozcan a cabalidad el objetivo del proyecto, la audiencia a la que va dirigido, y por supuesto, los lineamientos de marca, la voz, el tono y personalidad de la firma.
Esta consideración sobre la importancia del contenido no se tomaba en cuenta, hasta que productos digitales como You Tube, Amazon y otros, tuvieron que adaptar sus productos a diferentes sistemas operativos y dispositivos con los que los usuarios interactuaban de forma diferente.
Ahí se dieron cuenta de serias inconsistencias en estilo, tono y voz, así como oportunidades perdidas para optimizar el espacio.
Entonces, se comenzó a involucrar a los redactores, muchos de ellos con conocimientos de UX, conocidos como UX Writers, que trabajan, como hemos planteado, de la mano de diseñadores, estrategas de contenido, investigadores y diseñadores web.
En este entorno, el UX Writer se encarga de lo que se escribe en los botones y en breves instrucciones que acompañan el flujo de navegación para que no generen fricción o confusión alguna en los usuarios. Este aspecto transaccional, que tiene que ver más que nada con la navegación, se conoce como el Microcopy.
También esta persona es quien escribe el contenido mostrando la personalidad del producto, enfocándose en los usuarios, con un lenguaje sencillo, fácil de rastrear con la vista y en un orden lógico apropiado.
Se trata de entender cómo funciona el medio y cuánto han cambiado los hábitos de lectura. Por esto, es importante como comunicadores entender las tendencias de la industria de contenidos digitales y atemperar nuestro trabajo periodístico a esas nuevas corrientes.
A continuación una checklist para ayudar a tu equipo editorial a crear notas con un mejor UX:
Como hemos planteado en otras entregas, la experiencia de usuario es un proceso en evolución constante. Es importante hacer pruebas consistentemente, analizando y llevando registro de lo aprendido para que estos hallazgos sigan siendo parte del crecimiento de tu medio.
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